La Plataforma por la Reindustrialización Territorial (IBIAE-FEDAC-COEVAL) solicita la mejora de la CV-60 y muestra su preocupación por el aumento de las materias primas

La reunión de trabajo entre representantes de FEDAC, IBIAE, COEVAL tuvo lugar en la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Alcoy, con varios temas de vital importancia para las empresas de estas comarcas.

En primer lugar, la Plataforma por la Reindustrialización Territorial (IBIAE-FEDAC-COEVAL) hará llegar a la Generalitat Valenciana la gran preocupación que le produce la situación de la carretera CV-60, que es la que une las comarcas de l’Alcoià y el Comtat con la Safor; es decir, una carretera de tránsito de particulares y turistas, pero también de mercancías y de negocios.

El desgraciado accidente mortal registrado este fin de semana en esta carretera no hace más que justificar la necesidad de revisar y completar los tramos que no son de autovía y que tienen muy poca visibilidad. Esta es una reivindicación histórica y periódica que no se resuelve con el paso de los años. Una iniciativa que respalda también de manera categórica la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Alcoy.

Precios de materias primas

De otro lado, también con el apoyo de Cámara Alcoy, la Plataforma para la Reindustrialización Territorial (IBIAE-FEDAC-COEVAL), manifiesta la inquietud de las empresas, especialmente para las PYMES del territorio, al exagerado aumento del precio de las materias primas para la industria y los cada vez más complejos problemas a los que se tienen que enfrentar para conseguir esas materias en tiempo y forma.

La Plataforma, además de plantear la cuestión de los precios, pondrá sobre la mesa de las autoridades responsables la necesidad de encontrar sistemas y herramientas que faciliten el acceso a la información de los precios de las materias primas tanto en el mercado final como en el de mayoristas.

El precio de estos componentes es un asunto muy preocupante para el empresariado de las comarcas, eminentemente industrial y que, en el caso de las PYMES, puede alterar de manera más que significativa la rentabilidad de sus procesos de producción.